Fuente: De la Rueca a la Pluma
Del 11 al 25 de mayo, la Basílica de la Anunciación de Nuestra Señora del Carmen, en Alba de Tormes, acogerá un acontecimiento extraordinario: la veneración pública del cuerpo de santa Teresa de Jesús. Se trata de un hecho que solo ha tenido lugar en tres ocasiones desde su muerte en 1582: en 1760, en 1914 y ahora, en 2025. La comunidad del Carmelo Descalzo nos invita a vivir este tiempo como una oportunidad única de encuentro con el mensaje teresiano, en el mismo lugar donde reposan sus restos.
La apertura tendrá lugar el domingo 11 de mayo a las 9:00 h, en un acto simbólico presidido por el obispo de Salamanca, Mons. José Luis Retana. En él, la comunidad carmelita entregará la “Llave de la Basílica”, un gesto lleno de significado que expresa el deseo de abrir no solo las puertas del templo, sino también las del corazón.
Durante quince días, la Basílica permanecerá abierta de 9:00 a 22:00 horas, acogiendo peregrinos, fieles y visitantes en un ambiente de oración, liturgia y cultura. Entre los momentos destacados:
- El miércoles 14, la Eucaristía será presidida por Mons. Luis Argüello, arzobispo de Valladolid y presidente de la Conferencia Episcopal Española.
- El jueves 15, se celebrará una misa especial con la presencia del nuncio apostólico ante la Unión Europea, Mons. Bernardito Cleopas Auza, y diversas autoridades, incluido el duque de Alba.
- El domingo 18, el cardenal Antonio María Rouco Varela presidirá la misa de las 13:00 h, seguida por una hora santa animada por el grupo musical Hakuna.
- El sábado 24 se celebrará una procesión extraordinaria por las calles de Alba con la imagen de la Santa, seguida por una vigilia de oración abierta a todos.
- El martes 20, a las 22:00 h, se presentará oficialmente el busto “Vera Effigies”, obra de la escultora australiana Jennifer Mann, en presencia de autoridades civiles y eclesiásticas.
- La clausura tendrá lugar el domingo 25, con una solemne misa presidida por el P. Miguel Márquez Calle, General de la Orden del Carmelo Descalzo.
Este programa, cuidado con esmero, busca ofrecer una experiencia viva del carisma teresiano y fomentar la contemplación, la oración y la comunión en torno a esta gran Santa, cuya palabra y ejemplo siguen siendo luz para la Iglesia y para el mundo.
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